En Cuba, en una prisión del gobierno, está encerrado un hombre pobre, valiente y honesto. Se llama Silverio Portales Contrera y alzó su voz contra la dictadura por su indolencia y su desinterés en ayudar a los más humildes, esos cuyas viviendas corren peligro de derrumbe y que no saben si mañana amanecerán vivos.

“Silverio cayó preso por el proyecto “No más muertes en Cuba por derrumbe”. Cuando Silverio en la prisión se enteró que murieron tres niñas producto de un derrumbe, lloró muchísimo porque ese era su proyecto y él estaba evitando esas muertes”.

Le han robado el aire, la luz y ahora la visión de uno de sus ojos. Esos ojos que han visto la injusticia de la tierra, donde le dijeron que nunca un hombre negro y pobre como él iba a sufrir.

Mentiras del gobierno con sus policías y sus voceros. Mentiras de sus generales que conforman una mafia cercana a Raúl Castro y a su ex yerno Luis Alberto Rodríguez López Callejas. Mentira de esos supuestos luchadores que juraron alguna vez defender al pueblo y seguir siendo pueblo.

Los que le conocen no mienten. Sus amigos, su familia retratan un Silverio como un hombre de principios. Un hombre que está preso simplemente porque no aceptó el estado de las cosas, porque dijo lo que los otros por miedo no han querido decir.

Silverio Portales Contreras cumple sentencia de 4 años. Por supuesto, por desacato y desorden público, pues protestó ante la falta de voluntad del gobierno cubano para arreglar edificios en ruinas. Silverio miraba cómo caían las viviendas y cómo se enriquecía la mafia militar de Gaesa, reparando solo la parte donde recaudan divisas, sus hoteles, sus museos y dejando las viviendas del pueblo abandonadas a su suerte.

En silencio, Silverio fue tragando buche tras buche de amargura e impotencia, hasta que no pudo más. Es hora ya de parar las injusticias, de frenar la impunidad de un régimen que inventa delitos para someter y amedrentar a la oposición pacífica.

Retamos a las personas de buena voluntad de todo el mundo. Esos que hoy protestan contra el abuso de poder de las autoridades y de la policía norteamericana en el lamentable caso de George Floyd.

A esos le pedimos que se enteren que Silverio es también un hombre negro, pobre y discriminado, un hombre decente que ha alzado la voz por él y por los que le rodean. Su delito ha sido simplemente ser honrado, pero a sus carceleros no les importa que Silverio Portal tenga o no razón. No han tenido en cuenta que Silverio sufrió una trombosis que le dejó paralizada la parte izquierda de su cuerpo. Sus verdugos le golpearon hasta que perdió la visión de uno de sus ojos.

Las autoridades carcelarias cubanas lo tuvieron en celda de castigo y le prohíben hacer llamadas telefónicas. Por eso alcemos todas las voces de los que luchan por la justicia para que en el mundo siga existiendo la verdad. Si realmente queremos ser justos, los de la izquierda, los de la derecha, todos los seres humanos decentes de este mundo, gritemos juntos porque tenemos que salvar a Silverio.

#FreeSilverio