Hay una forma sencilla y muy práctica para para evaluar el cataclismo ocasionado por la plaga castro-comunista a Cuba y su pueblo: mostrarlo con cifras y comparaciones afincadas en la infalibilidad de las matemáticas, siempre subversivas en la isla.

Un área muy elocuente para que las cifras por sí solas desenmascaren al dictador Raúl Castro y la claque de vividores que lo apoyan es la economía en general, y dentro de ella el comercio exterior. Porque siendo Cuba socialista un país dependiente como ninguno otro en Occidente del sector externo exporta muy poco porque produce muy poco, y cada vez menos ahora en la etapa final del comunismo. Es más en realidad el castrismo está ya muerto y solo falta su funeral.

La Cuba “liberada” exporta hoy 4.3 veces menos que en 1958

Por ejemplo, en 1958, cuando era “explotada por el imperialismo”, Cuba exportó bienes por valor de $732 dólares de entonces, equivalentes a $7,488 millones de dólares de hoy, pues el dólar de 1958 vale hoy $10.23 dólares, según los cálculos de los expertos de dineroeneltiempo.com

En cambio, en 2021 la Cuba liberada hace 63 años por los Castro y el aventurero argentino Che Guevara exportó bienes por valor $1,548 millones de dólares, ¡4.3 veces menos!

El valor per cápita de las exportaciones cubanas en 1958 fue de $1,152 dólares de hoy por cada uno de los 6.5 millones de habitantes entonces. Si congeláramos en el tiempo ese per cápita y lo aplicáramos en 2021 el valor de las exportaciones de bienes de Cuba habría sido de $13,017 millones de dólares, 8.4 veces superior a lo vendido por Raúl “El Cruel”.

Pero hay más, los países normales de todo el planeta en estas seis décadas transcurridas multiplicaron sus exportaciones por tres, cuatro, cinco, o más veces. La pujante Cuba (su ingreso per cápita en 1958 duplicaba al de España) no habría sido la excepción. Asumiendo que hubiese multiplicado por 5 sus ventas externas la isla en 2021 habría podido exportar $65,085 millones, ¡42 veces más!

Chile en 2021 exportó $90,000 millones, Cuba $1,548 millones

Y no se trata de ciencia ficción, ni de trucos estadísticos. En 1958 Cuba y Chile tenían una población casi similar (Cuba 6.6 millones de habitantes y Chile, 7.2 millones) y un Producto Interno Bruto (PIB) per cápita casi idéntico: Cuba $356 dólares, y Chile $360 dólares. Y las exportaciones de bienes tenían valores muy similares, según datos de la ONU

Pues bien, el Chile “explotado por el capitalismo” en 2021 exportó por valor de $89,950 millones de dólares, según cifras oficiales, o sea, $4,684 dólares por cada uno de los 19.2 millones habitantes del país. La Cuba socialista, en cambio, exportó apenas $137 dólares por cada uno de los 11.3 millones de cubanos de la isla, ¡34 veces menos!

El colmo es que Cuba hoy sigue dependiendo de los mismos cuatro productos de 1958 para sus exportaciones de los cuatro productos básicos de hace de 63 años, con el agravante de que ahora ya no puede exportar azúcar, sino solo níquel, tabaco y ron, y en cantidades cada vez menores.

El país este año (2022) produjo 473,000 toneladas de azúcar y el consumo nacional oscila entre 650,000-700,000 toneladas. Increíble, la otrora azucarera mundial ya no exporta azúcar, la tiene que importar, y encima no tiene dinero para ello. Quién se lo habría dicho a Julio Lobo o a los Gómez Mena en los años 50.

Círculo vicioso del comunismo asfixia la economía cubana

El meollo del problema aquí es estructural y no coyuntural o culpa del “bloqueo yanqui”. El sistema comunista crea un círculo vicioso pernicioso: el país produce poco, exporta poco, y no genera recursos financieros para importar lo que la economía estatizada es incapaz de producir, incluyendo los alimentos, medicamentos, materias primas, etc. O sea, Cuba exporta cada vez menos porque cada año que pasa tiene menos que vender.

Cuba ha tenido 60 déficits comerciales en 61 años de socialismo

Ya vimos que Cuba en 2021 exportó apenas $137 dólares por habitante. Sin embargo, importó $746 per cápita, cinco veces menos para un déficit de $609 por habitante. Compró productos por valor de $8,431 millones de dólares, incluyendo unos $2,000 millones en la compra a granjeros extranjeros de productos agrícolas y pecuarios que se habrían producir en las tierras cubanas.

Desde que en 1961 Fidel Castro proclamó el carácter socialista de su dictadura dinástica Cuba ha registrado anualmente déficit en su balanza comercial, salvo un excedente casi simbólico de 10 millones de dólares en 1974. Es decir, en 61 años de comunismo, Cuba ha sufrido 60 déficits, un bochornoso récord en Occidente, que siempre han sido financiado por sus mecenas, o se han acumulado en deudas externas fabulosas que La Habana nunca ha pagado a nadie.

Esa es una de las tantísimas verdades, mostradas con la fría y desideologizada exactitud de las matemáticas, sobre la gran estafa del siglo XX en América, la “revolución cubana”, el mayor flagelo socioeconómico que ha tenido país alguno en este continente.