¿Cómo se comporta la escasez de medicinas en Cuba?

Desde el segundo semestre del pasado año y lo que va de este, la escasez de medicinas en la red de farmacias de todo el país es constante, afectando fundamentalmente la salud de pacientes con enfermedades crónicas como la hipertensión arterial, el asma bronquial, la cardiopatía, la diabetes, padecimientos renales, entre otros.

Elsa Fundora Molina tiene tratamiento psiquiátrico, depende del Nitrazepan y el Clordiazepóxido para combatir la ansiedad y el insomnio. La falta de ambos fármacos está dejando secuelas en su estabilidad física y emocional. Según su testimonio lleva cinco días sin conciliar el sueño, lo que le provoca gran alteración nerviosa. “Mañana visitaré al psiquiatra para que me cambie el tratamiento porque no aguanto más” dijo visiblemente afectada.

“El medicamento de mi mamá (un antihipertensivo) lo cogí una sola vez el pasado año, tenía que pedirle al vecino constantemente porque llegaba a la farmacia y se agotaba”, nos comentó Rosaura Pérez Billares. Sin quererlo Pérez apunta a otra dimensión del fenómeno, la distribución insuficiente de múltiples fármacos que se dan como existentes.

Una empleada de la farmacia 5 de septiembre, que pidió no reveláramos su nombre, dijo: “Para que lo entiendas, en mi centro hay registrados, digamos, 100 pacientes que consumen el Captopril, en cada envío viene una cantidad de comprimidos que solo satisface la demanda de diez enfermos. Noventa se quedan sin tratamiento, sin embargo, en los reportes de prensa no se contempla esa falta y se menciona al medicamento en la lista de los existentes”.

Falta de medicinas en Cuba

De 100 enfermos, 90 se quedan sin tratamiento por falta de medicinas

La insuficiencia contempla también los tratamientos que se encuentran controlados desde hace años por Tarjeta de Control. Muchos daban por sentado que por ser su venta planificada no escasearían. Sin embargo, no resulta así. Por otra parte, siguiendo una mentalidad racionalizadora, Salud Pública ha decidido disminuir las dosis que se venía administrando en ciertos tratamientos como es el caso de los antihipertensivos.

En todos los consultorios, a los pacientes que tienen el Enalapril se les está bajando la dosis. De dos tabletas que tomaban al día se les está dejando una. “Se estima que pueden mantenerse estables tomando una sola”, nos revela Nairobi Suarez, enfermera de un puesto médico en Caonao, Cienfuegos.

Otra de las aristas de la crisis es que el Ministerio de Salud Pública, ha decidido priorizar (aunque sin lograr siquiera cubrir la demanda existente de estos) aquellos preparados cuya ausencia puede significar lesiones e incluso la muerte del enfermo. Así que, remedios como la Aspirina, la Duralgina u otros similares deberán de esperar por tiempos mejores.

Una de las quejas más recurrentes de personas que acuden a consulta, es que los médicos recetan lo que falta.  Aunque a cada galeno Salud Pública le entrega una lista de medicamentos que teóricamente se pueden encontrar, por no actualizarse la planilla en tiempo real muchas veces sucede que llegando el paciente a la droguería se agotó la cura, viéndose obligado a regresar por el consultorio para cambiar la medicación.

Causas de la escasez de medicinas en Cuba

El gobierno cubano ha reconocido que afronta dificultades con el pago de las materias primas para la fabricación de medicinas, lo que ha llevado a la pérdida de proveedores en el extranjero, afectando la producción nacional de medicamentos. BioCubaFarma, la entidad nacional encargada de estos menesteres abarca hasta el 77% de lo que se vende en la red de farmacias.

Nairobi Suárez tiene su propia teoría. “La falta de medicina debe ser un problema administrativo. Hay pacientes que tienen medicamentos prescritos que no necesitan. Compran el producto en la farmacia para venderlo”. Detrás de este ilícito puede ocultarse la complicidad de médicos, falsos pacientes y posiblemente algún que otro boticario.

Otra causa segura del desabastecimiento son las donaciones que hace la isla a aliados ideológicos del gobierno como Venezuela, Bolivia o Nicaragua. Profesionales que prestan servicios en esas naciones han constatado como medicinas inexistentes en la isla son administradas de forma gratuita en los rincones más apartados de esas naciones.

Cómo solucionar la falta de medicinas en Cuba

La vía más socorrida es la de comprar el remedio en el mercado negro, y aunque la mayoría reniega públicamente de esa práctica, en privado se saltan las consideraciones morales y pagan por traer alivio al padecimiento.  “Yo estuve alrededor de ocho meses sin coger medicamentos en la farmacia y me los traían a la casa para vendérmelos. Los frascos con 30 tabletas del Enalapril me los vendieron a 15 pesos”, nos comenta la ama de casa Sonia Esteves. “Yo sé que no está bien adquirir las pastillas por esta vía, pero realmente las necesito”

Las curas con medicina verde o técnicas de la medicina tradicional como la acupuntura, las terapias homeopáticas, e incluso el empleo de la hipnosis en sustitución de analgésicos o anestésicos, también se tiene en cuenta.

Sin embargo, no son pocos los enfermos que como Onelia Alma asumen una actitud conformista y deciden prescindir de la terapia para no incomodarse. Al final solo queda la queja como forma de desahogo. “Esto, como dice el dicho, pasa de castaño oscuro,” sentencia Alma.