¿De dónde va a sacar el régimen castrista los $20,000 millones de dólares anuales que necesita para evitar el colapso de la economía y la hambruna que ya se aproxima a los cubanos por la grave crisis económica, exacerbada por la terapia de choque del llamado “Plan de Reordenamiento” y la negativa del dictador Raúl Castro a liberar las fuerzas productivas?

La cifra mencionada arriba ya era muy baja para lo que necesita realmente el país. Debido al carácter parasitario del modelo económico estatista se requiere de más dinero, pero el país no lo produce. Tampoco puede pedir créditos pues no paga lo que debe, y nadie le presta.

Cuba produce muy poco y necesita importar de todo, incluso el 80% de los alimentos que se consumen. Y por producir poco las exportaciones de bienes cubanas son realmente ridículas, pese a que constituyen la vía fundamental que tiene un país no industrializado país para obtener divisas.

En 2019 las exportaciones no llegaron a los $1,900 millones. Costa Rica, en cambio, un país con la mitad de la población de Cuba, en 2019 exportó bienes por valor de $11,312 millones. Y República Dominicana exportó $11,020 millones. Hace 60 años Cuba quintuplicaba las exportaciones dominicanas.

El castrismo solo puede subsistir haciendo de proxeneta internacional, succionando subsidios colosales, primero de Moscú y luego a Venezuela, aunque en menor escala que la soviética.

Antes del descalabro económico de su colonia venezolana los Castro recibían de Caracas unos $6,000-$7,000 millones, entre subsidios enmascarados y el robo del 75% -80% del salario de los médicos cubanos allí explotados como esclavos. También Venezuela entregaba gratuitamente unos 38 millones de barriles de petróleo y gasolina anuales, el 65% del consumo nacional, con un valor aproximado de $1,800 millones según los precios promedio del crudo en el mercado mundial en los últimos 6 o 7 años.

Con los médicos cubanos explotados en el resto del mundo puede que el gobierno reciba otros cientos de millones de dólares, pero no mucho más, pues la cifra de esclavos de bata blanca ha caído en casi 9,000 galenos.

Entre remesas, paquetes y las visitas de cubanos a sus familiares en la isla el país antes de la pandemia Cuba recibía unos $6,700 millones. Y el turismo procedente del resto del mundo dejaba posiblemente unos $1,400 millones en ingresos brutos, pero ya en 2019 se contrajo esa cifra, pues la isla recibió 360,152 turistas menos que en 2018.

En 2020, con el Covid-19, el descenso del turismo fue espectacular. A nivel global la disminución del número de turistas redujo en $460,000 millones de dólares los ingresos del sector en el primer semestre del año, según la Organización Mundial del Turismo (OMT). Con las exportaciones de bienes y la reexportación de parte del petróleo venezolano el régimen castrista obtenía posiblemente $3,500 millones, que ya vimos cayeron a la mitad en 2019.

Se dispararía el descontento con apagones medievales

La dictadura hasta ahora se ha librado de masivos e interminables apagones que como los de los años 90 gracias al combustible que le sigue regalando Nicolás Maduro, pero esas entregas son cada vez más espaciadas y menor el volumen de petróleo obsequiado, y no por las sanciones de EEUU sino porque el chavismo destruyó la industria petrolera. Si en los años 90 la gente rompía vidrieras a pedradas durante las noches medievales, es de imaginarse qué puede ocurrir ahora si las ciudades se quedan a oscuras con la caldera social ya a punto de estallar

Todas las búsquedas de divisas del régimen citadas hasta ahora suman un poco más de los $20,000 millones que la mafia militar castrista pudo haber estado recibiendo, hasta hace unos tres o cuatro años, y que mantuvieron a Cuba casi en la miseria, con muchos cubanos viviendo en la pobreza extrema según los parámetros del Banco Mundial.

Esa cifra el régimen militar en 2021 de ninguna manera la obtendrá. La vacunación masiva contra el Covid-19 tomará tiempo. Los aviones no volarán repletos de turistas por un buen rato. Los ingresos por turismo en 2021 no prometen mucho a GAESA. Venezuela está casi agotada.

Si no hay apertura económica habrá hambruna

Sin disponer de una bola de cristal para visualizar el futuro, tentativamente podría estimarse que la dictadura puede que capte en el año a punto de comenzar un poco más de la mitad, tal vez unos $12,000 millones. Y eso, si no hay un cambio de régimen en Venezuela.

Entonces ¿de dónde sacará el régimen las restantes divisas que necesita? La respuesta es una sola:  no hay manera de que el régimen militar alcance esa cifra en 2021 si no libera las fuerzas productivas, abre la economía a la propiedad privada y restablecen la libertades individuales secuestradas por los Castro hace seis décadas.

De no hacerlo, el déficit de tantos miles de millones de dólares que requiere para evitar una posible crisis humanitaria en Cuba no lo va a cubrir nadie. Es mucho dinero. Ni la Administración Biden, ni nadie en el mundo regala dinero. Los mecenas de pillos y vividores se acabaron.